Proyecto Hidroeléctrico Pirrís

INAUGURACION PLANTA HIDROELECTRICA PIRRIS

PALABRAS PRESIDENTE EJECUTIVO ICE

12 SETIEMBRE 2011

Estimados:

Un acto inaugural de una obra es un momento solemne. Es altamente simbólico. Trata de sintetizar en un instante el esfuerzo de muchas personas. Resume los momentos de euforia con el éxito y de angustia con las desgracias. Es también la oportunidad para presentar a la sociedad, costarricense, un aporte, grande o pequeño, en la búsqueda incesante de nuestro progreso material y a veces espiritual. Asimismo, es la oportunidad de reflexión, de evaluar lo que hemos hecho y cómo encaja en nuestras aspiraciones. Y finalmente, también es el momento para ver al futuro y lo que queremos que sea, y cuáles fueron las lecciones aprendidas al poner en funcionamiento la obra que se inaugura.

Para empresas estatales como el ICE, hacemos numerosas inauguraciones cada año, unas más relevantes que otras, pero todas van dirigidas a cumplir los mandatos legales que le dieron vida hace ya 62 años. Hemos inaugurado a lo largo de los años, de diferentes formas, cientas de obras del sector eléctrico y de telecomunicaciones.

Algunas han sido en casa con nuestros trabajadores, otras con los pueblos beneficiados, y otras, como en el caso actual, tenemos la presencia del más alto nivel político del Estado: la Presidenta de la República y su apreciable comitiva.

Y su presencia aquí tiene múltiples razones:

Primero, porque ella admira la labor realizada por el ICE en pro del desarrollo de los pueblos;

Segundo, porque es una obra muy significativa para el país, asegurar el suministro eléctrico en forma continua es vital para nuestro crecimiento económico, y Pirrís aporta en un momento oportuno su cuota;

Tercero, porque ella es una abanderada y fiel creyente en la importancia de desarrollar las energías renovables, al grado de desterrar el uso de petróleo para generar electricidad. Lo ha dicho y lo ha probado.

Y Cuarto, porque quería constatar que esta grandiosa obra estaba lista y poder darle la señal de inicio.

Nos sentimos muy honrados con su presencia.

Aquí, en este mismo sitio, hace tan solo tres años lo que había era un enorme hueco, un precipicio hasta llegar al río. Hoy tenemos una presa de concreto, la más alta del país, y un enorme embalse de regulación de agua totalmente lleno y listo para ser aprovechado, generando electricidad.

Esa agua es conducida a través de un largo túnel hasta una casa de máquinas, ubicada ya en Parrita, en donde sus generadores nos proveen de otros 134 MW de electricidad limpia, renovable. De ahí la electricidad se mueve a través de líneas de alto voltaje a todo el país.

En estas dos frases simplifico y sintetizo el resultado final de una década de esfuerzos para completar, tal vez, la obra de ingeniería más accidentada y compleja que el ICE ha llevado a cabo en su historia. Muchos obstáculos, de todo tipo, debieron ser superados para podernos reunir hoy aquí.

Abundaron las limitaciones financieras, las contractuales, las geológicas, y las climáticas. A todas ellas los profesionales, técnicos y obreros del Proyecto y del ICE no le arrugaron la cara, y con tesón, coraje y mística, las fueron superando, una a una. Yo no puedo más que felicitarlos por personalizar lo que dice el himno del ICE, que acabamos de cantar.

Hablo del terremoto de Parrita en 2004, la tormenta Alma, una nueva depresión tropical, ambas en 2008, y más recientemente la tormento Thomas. Hablo de los problemas geológicos complejos en este sitio de presa y de su impermeabilización, hablo de restricciones de inversión.

Aquí trabajaron durante largos años cerca de 3000 personas, casi 2000 de los cantones vecinos. Todos han salido mejor preparados para afrontar el futuro que cuando entraron a esta obra.

La relación con las 24 comunidades que cubren el área de influencia del Proyecto, ubicadas en 7 cantones, creo que ha estado acorde con las políticas de que no puede haber desarrollo económico sin tomar en cuenta los aspectos socio ambientales. La lista de aportes que he oído y leído es enorme y es muy significativo que el ICE se haya adaptado al modelo de desarrollo sostenible, en el cual creemos firmemente.

Este proyecto costó $630 millones, fue financiado por el gobierno de Japón, el BCIE, emisiones financieras y aportes propios, todos en condiciones financieras excelentes y apropiadas para el tipo de obra que es. Debo agradecerles en nombre del ICE su confianza en nosotros al apoyar un complejo proyecto desde el principio hasta el final. Hoy cosechamos esa perseverancia. De ese costo, cerca de $44 millones (un 7%) fueron destinados a la gestión socio ambiental a lo largo de la década anterior.

En total el costo económico medio de la energía de esta planta alcanza 10.5 centavos dólar por KWh. Creo que es un valor aceptable y competitivo.

Déjenme hablarles de lo que hemos hecho y lo que viene. Este año fue de cosecha energética: pusimos a operar la planta Garabito de 200 MW, que aunque térmica, sustituye diesel caro por bunker más barato, y además mejora la eficiencia y las emisiones; también la geotérmica de Pailas, de 35 MW, que es una planta térmica que no usa hidrocarburos, sino vapor de la tierra; y hoy aquí Pirrís, hidroeléctrica de 134 MW. En pocas semanas, nuestra empresa distribuidora hermana, Coopesantos pondrá a operar un Parque Eólico de 15 MW. En total casi 400 MW en un año! Mucho más que el crecimiento de la demanda.

El siguiente año de amplia cosecha espero sea a partir del 2013. Ahí veremos la entrada en operación de Toro 3 en San Carlos, en alianza con JASEC, Balsa Inferior de la CNFL, las hidroeléctricas Cubujuqui de Coopelesca, Torito, Chucás y Capulín, en BOTs con el sector privado, las eólicas de Valle Central y de Guanacaste, también en BOT con el sector privado. En total sumo 325 MW adicionales. También haremos más eficiente la planta térmica de Moín, para que con el mismo consumo de diesel generemos un 50% adicional. Eso le da firmeza a las energías renovables.

Con lo anterior, más algunas plantas privadas adicionales amparadas en la ley 7200 vigente, el país podrá cumplir con la meta del Plan Nacional de Desarrollo de asegurar un mínimo de 95% renovables para el año 2014, y tal vez excederla.

Pero qué sigue? No somos cortoplacistas. Está en plena construcción el Proyecto Hidroeléctrico de Reventazón de 300 MW, programado para operar en 2016. Lleva un 22% de avance de construcción y este fin de año esperamos levantar el financiamiento completo para esta obra, a través de un consorcio de variadas fuentes, coordinado por el BID.

Y detrás viene el gran proyecto El Diquís, ubicado en la zona sur pacífico del país, con 630 MW. Este proyecto está en la etapa de preparación de los EIAs y la obtención de la licencia ambiental, y esperamos cumplir con todo el ordenamiento legal necesario para iniciar su construcción en el año 2013.

Intercalados a estos dos megaproyectos hidroeléctricos, esperamos incluir algunos propios y los que la legislación permita.

Ya vamos por buen camino en la interconexión eléctrica con Centroamérica y el mercado regional. Eso le asegurará al país que los excedentes de energías renovables en los próximos años, podrán ser colocados en dicho mercado por el país. Y posiblemente a mejores precios que los que se fijan en el país, pues sustituirán térmico más costoso en esos países. Esto le da viabilidad económica a la meta de incrementar la proporción de renovables nacionales.

Todo lo anterior nos lleva a que el sector eléctrico cumplirá con su compromiso de generar un 100% con renovables para el año 2021, año del bicentenario.

Regreso a Pirrís. Esta obra, en mi opinión como ingeniero, rompe varios moldes: (i) presa de tecnología de concreto rolado de mayor altura del país; (ii) caída más alta de Centroamérica, de 800 metros; (iii) túnel de conducción con más filtraciones de agua, desde el de Tapantí. Cada uno de estos retos fueron atendidos adecuadamente por nuestros ingenieros de diseño y de construcción.

Esto patentiza que el ICE está organizado para pensar y actuar en grande. Y es lo que hará en los próximos años.

Y lo hará con sostenibilidad, profesionalismo, competitividad, capacidad empresarial, cumpliendo metas socio ambientales y con el compromiso de la universalidad y solidaridad en la entrega de sus servicios públicos, tal como lo dicta la ley.

Muchas gracias.

Pirrís: Una obra heroica

136 MW más de energía para el país.
Inversión supera los $627 millones.

El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), hace entrega al país de una nueva obra generadora de energía: la Planta Hidroeléctrica Pirrís.

Ubicada entre la zona de Los Santos y Parrita, tiene un área total de influencia de 440 km2. La inversión asciende a más de $627 millones y contó con el apoyo de Japan International Corporation Agency (JICA) y del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).

Pirrís inyecta 136 nuevos megavatios al Sistema Eléctrico Nacional, lo que se traduce en beneficio para más de 160 mil hogares costarricenses.

“La matriz energética del ICE es de las más diversificadas a nivel mundial. Con hidroelectricidad, geotermia, eólica y biomasa, se ha ido cumpliendo una compleja tarea y un reto gratificante. Pirrís es ejemplo de trabajo, esperanza, compromiso y heroísmo. Hoy está al servicio del país”, manifestó Gravin Mayorga, gerente de Electricidad del ICE.

Construcción innovadora

Durante la etapa de construcción de Pirrís, 3 000 trabajadores levantaron la presa más alta del país, con 113 metros de altura y 266 metros de la

rgo en la cresta, convertida hoy en una carretera que une las comunidades de Llano Bonito de León Cortés y San Carlos de Tarrazú. Las dimensiones de esta presa la ubican en su género como décima a nivel mundial.

La presa se construyó en sólo 14 meses. El ICE utilizó por primera vez en el país el novedoso método de Concreto Compactado con Rodillo (RCC, por sus siglas en inglés), que puede transportarse con facilidad en vagoneta, ser extendido con tractor y compactado con un vibrador. Este material es reconocido a nivel mundial por su alto rendimiento. El volumen del concreto de la presa equivale a la edificación de cien mil viviendas.

El embalse de Pirrís almacena hasta 30 millones de m3 de agua.

El túnel de conducción es otra gran obra de ingeniería en manos del ICE. Se hizo con concreto y material blindado y alcanza los 1 200 metros de profundidad y 10 000 metros de largo. Su diseño es exclusivo, debido a las particularidades del terreno, tiene una inclinación especial para mejor caída y velocidad. El túnel finaliza “aguas abajo” en la Casa de máquinas, en El Carmen de Bijagual de Aserrí.

La Casa de máquinas está cimentada en un pozo de 27 metros de diámetro y 23 metros de profundidad, en una edificación de 15 metros de altura para proteger las dos turbinas de 68 MW cada una que operan la Planta. Se enlaza con la Subestación de 230 kW que refuerzan la línea de transmisión Tarbaca-Pirrís-Parrita.

“Por sus características, la Planta Hidroeléctrica Pirrís responde a las metas propuestas por el ICE: fortalece la calidad del suministro de electricidad del país, refuerza la generación de energías renovables y disminuye el consumo de petróleo”, subrayó Teófilo de la Torre, presidente ejecutivo del ICE.

Emergente victorioso

Como un Ave Fénix, la Planta Hidroeléctrica Pirrís venció retos durante las fases de estudio y edificación que, entre otras dificultades, se vio gravemente afectada con la Tormenta Alma en el 2008 y, a finales del año pasado, con la Tormenta Thomas.

Así, Pirrís se levantó de los escombros. Sus trabajadores tomaron herramientas, coraje para hacerle frente a los daños causados por esos fenómenos naturales.

Pirrís ha escrito con su historia relatos de satisfacción en 24 comunidades, siete cantones y dos provincias que se beneficiaron con mayor desarrollo local.

Once millones de dólares fueron aportados por el ICE en 136 proyectos sociales y ambientales. Entre ellos 15 km nuevos en caminos, señalización vial, 34 km en aceras, barandas, aulas, plazas deportivas y reforzamiento a centros de salud. La educación ambiental y planes de manejo de la cuenca propiciaron la calidad de vida y el crecimiento integral de los pobladores.

Álvaro Castillo, director del proyecto, considera que la puesta en marcha de Pirrís es una garantía al desarrollo sostenible. “El ICE pone a la orden del país una planta de la más alta calidad, de energía limpia y renovable, diseñada y construida por costarricenses, que suma al camino de progreso y de calidad de vida de nuestro país”.


miércoles, 14 de septiembre de 2011

martes, 13 de septiembre de 2011

Proyecto Hidroeléctrico Pirrís

INAUGURACION PLANTA HIDROELECTRICA PIRRIS

PALABRAS PRESIDENTE EJECUTIVO ICE

12 SETIEMBRE 2011

Estimados:

Un acto inaugural de una obra es un momento solemne. Es altamente simbólico. Trata de sintetizar en un instante el esfuerzo de muchas personas. Resume los momentos de euforia con el éxito y de angustia con las desgracias. Es también la oportunidad para presentar a la sociedad, costarricense, un aporte, grande o pequeño, en la búsqueda incesante de nuestro progreso material y a veces espiritual. Asimismo, es la oportunidad de reflexión, de evaluar lo que hemos hecho y cómo encaja en nuestras aspiraciones. Y finalmente, también es el momento para ver al futuro y lo que queremos que sea, y cuáles fueron las lecciones aprendidas al poner en funcionamiento la obra que se inaugura.

Para empresas estatales como el ICE, hacemos numerosas inauguraciones cada año, unas más relevantes que otras, pero todas van dirigidas a cumplir los mandatos legales que le dieron vida hace ya 62 años. Hemos inaugurado a lo largo de los años, de diferentes formas, cientas de obras del sector eléctrico y de telecomunicaciones.

Algunas han sido en casa con nuestros trabajadores, otras con los pueblos beneficiados, y otras, como en el caso actual, tenemos la presencia del más alto nivel político del Estado: la Presidenta de la República y su apreciable comitiva.

Y su presencia aquí tiene múltiples razones:

Primero, porque ella admira la labor realizada por el ICE en pro del desarrollo de los pueblos;

Segundo, porque es una obra muy significativa para el país, asegurar el suministro eléctrico en forma continua es vital para nuestro crecimiento económico, y Pirrís aporta en un momento oportuno su cuota;

Tercero, porque ella es una abanderada y fiel creyente en la importancia de desarrollar las energías renovables, al grado de desterrar el uso de petróleo para generar electricidad. Lo ha dicho y lo ha probado.

Y Cuarto, porque quería constatar que esta grandiosa obra estaba lista y poder darle la señal de inicio.

Nos sentimos muy honrados con su presencia.

Aquí, en este mismo sitio, hace tan solo tres años lo que había era un enorme hueco, un precipicio hasta llegar al río. Hoy tenemos una presa de concreto, la más alta del país, y un enorme embalse de regulación de agua totalmente lleno y listo para ser aprovechado, generando electricidad.

Esa agua es conducida a través de un largo túnel hasta una casa de máquinas, ubicada ya en Parrita, en donde sus generadores nos proveen de otros 134 MW de electricidad limpia, renovable. De ahí la electricidad se mueve a través de líneas de alto voltaje a todo el país.

En estas dos frases simplifico y sintetizo el resultado final de una década de esfuerzos para completar, tal vez, la obra de ingeniería más accidentada y compleja que el ICE ha llevado a cabo en su historia. Muchos obstáculos, de todo tipo, debieron ser superados para podernos reunir hoy aquí.

Abundaron las limitaciones financieras, las contractuales, las geológicas, y las climáticas. A todas ellas los profesionales, técnicos y obreros del Proyecto y del ICE no le arrugaron la cara, y con tesón, coraje y mística, las fueron superando, una a una. Yo no puedo más que felicitarlos por personalizar lo que dice el himno del ICE, que acabamos de cantar.

Hablo del terremoto de Parrita en 2004, la tormenta Alma, una nueva depresión tropical, ambas en 2008, y más recientemente la tormento Thomas. Hablo de los problemas geológicos complejos en este sitio de presa y de su impermeabilización, hablo de restricciones de inversión.

Aquí trabajaron durante largos años cerca de 3000 personas, casi 2000 de los cantones vecinos. Todos han salido mejor preparados para afrontar el futuro que cuando entraron a esta obra.

La relación con las 24 comunidades que cubren el área de influencia del Proyecto, ubicadas en 7 cantones, creo que ha estado acorde con las políticas de que no puede haber desarrollo económico sin tomar en cuenta los aspectos socio ambientales. La lista de aportes que he oído y leído es enorme y es muy significativo que el ICE se haya adaptado al modelo de desarrollo sostenible, en el cual creemos firmemente.

Este proyecto costó $630 millones, fue financiado por el gobierno de Japón, el BCIE, emisiones financieras y aportes propios, todos en condiciones financieras excelentes y apropiadas para el tipo de obra que es. Debo agradecerles en nombre del ICE su confianza en nosotros al apoyar un complejo proyecto desde el principio hasta el final. Hoy cosechamos esa perseverancia. De ese costo, cerca de $44 millones (un 7%) fueron destinados a la gestión socio ambiental a lo largo de la década anterior.

En total el costo económico medio de la energía de esta planta alcanza 10.5 centavos dólar por KWh. Creo que es un valor aceptable y competitivo.

Déjenme hablarles de lo que hemos hecho y lo que viene. Este año fue de cosecha energética: pusimos a operar la planta Garabito de 200 MW, que aunque térmica, sustituye diesel caro por bunker más barato, y además mejora la eficiencia y las emisiones; también la geotérmica de Pailas, de 35 MW, que es una planta térmica que no usa hidrocarburos, sino vapor de la tierra; y hoy aquí Pirrís, hidroeléctrica de 134 MW. En pocas semanas, nuestra empresa distribuidora hermana, Coopesantos pondrá a operar un Parque Eólico de 15 MW. En total casi 400 MW en un año! Mucho más que el crecimiento de la demanda.

El siguiente año de amplia cosecha espero sea a partir del 2013. Ahí veremos la entrada en operación de Toro 3 en San Carlos, en alianza con JASEC, Balsa Inferior de la CNFL, las hidroeléctricas Cubujuqui de Coopelesca, Torito, Chucás y Capulín, en BOTs con el sector privado, las eólicas de Valle Central y de Guanacaste, también en BOT con el sector privado. En total sumo 325 MW adicionales. También haremos más eficiente la planta térmica de Moín, para que con el mismo consumo de diesel generemos un 50% adicional. Eso le da firmeza a las energías renovables.

Con lo anterior, más algunas plantas privadas adicionales amparadas en la ley 7200 vigente, el país podrá cumplir con la meta del Plan Nacional de Desarrollo de asegurar un mínimo de 95% renovables para el año 2014, y tal vez excederla.

Pero qué sigue? No somos cortoplacistas. Está en plena construcción el Proyecto Hidroeléctrico de Reventazón de 300 MW, programado para operar en 2016. Lleva un 22% de avance de construcción y este fin de año esperamos levantar el financiamiento completo para esta obra, a través de un consorcio de variadas fuentes, coordinado por el BID.

Y detrás viene el gran proyecto El Diquís, ubicado en la zona sur pacífico del país, con 630 MW. Este proyecto está en la etapa de preparación de los EIAs y la obtención de la licencia ambiental, y esperamos cumplir con todo el ordenamiento legal necesario para iniciar su construcción en el año 2013.

Intercalados a estos dos megaproyectos hidroeléctricos, esperamos incluir algunos propios y los que la legislación permita.

Ya vamos por buen camino en la interconexión eléctrica con Centroamérica y el mercado regional. Eso le asegurará al país que los excedentes de energías renovables en los próximos años, podrán ser colocados en dicho mercado por el país. Y posiblemente a mejores precios que los que se fijan en el país, pues sustituirán térmico más costoso en esos países. Esto le da viabilidad económica a la meta de incrementar la proporción de renovables nacionales.

Todo lo anterior nos lleva a que el sector eléctrico cumplirá con su compromiso de generar un 100% con renovables para el año 2021, año del bicentenario.

Regreso a Pirrís. Esta obra, en mi opinión como ingeniero, rompe varios moldes: (i) presa de tecnología de concreto rolado de mayor altura del país; (ii) caída más alta de Centroamérica, de 800 metros; (iii) túnel de conducción con más filtraciones de agua, desde el de Tapantí. Cada uno de estos retos fueron atendidos adecuadamente por nuestros ingenieros de diseño y de construcción.

Esto patentiza que el ICE está organizado para pensar y actuar en grande. Y es lo que hará en los próximos años.

Y lo hará con sostenibilidad, profesionalismo, competitividad, capacidad empresarial, cumpliendo metas socio ambientales y con el compromiso de la universalidad y solidaridad en la entrega de sus servicios públicos, tal como lo dicta la ley.

Muchas gracias.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Pirrís: Una obra heroica

136 MW más de energía para el país.
Inversión supera los $627 millones.

El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), hace entrega al país de una nueva obra generadora de energía: la Planta Hidroeléctrica Pirrís.

Ubicada entre la zona de Los Santos y Parrita, tiene un área total de influencia de 440 km2. La inversión asciende a más de $627 millones y contó con el apoyo de Japan International Corporation Agency (JICA) y del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).

Pirrís inyecta 136 nuevos megavatios al Sistema Eléctrico Nacional, lo que se traduce en beneficio para más de 160 mil hogares costarricenses.

“La matriz energética del ICE es de las más diversificadas a nivel mundial. Con hidroelectricidad, geotermia, eólica y biomasa, se ha ido cumpliendo una compleja tarea y un reto gratificante. Pirrís es ejemplo de trabajo, esperanza, compromiso y heroísmo. Hoy está al servicio del país”, manifestó Gravin Mayorga, gerente de Electricidad del ICE.

Construcción innovadora

Durante la etapa de construcción de Pirrís, 3 000 trabajadores levantaron la presa más alta del país, con 113 metros de altura y 266 metros de la

rgo en la cresta, convertida hoy en una carretera que une las comunidades de Llano Bonito de León Cortés y San Carlos de Tarrazú. Las dimensiones de esta presa la ubican en su género como décima a nivel mundial.

La presa se construyó en sólo 14 meses. El ICE utilizó por primera vez en el país el novedoso método de Concreto Compactado con Rodillo (RCC, por sus siglas en inglés), que puede transportarse con facilidad en vagoneta, ser extendido con tractor y compactado con un vibrador. Este material es reconocido a nivel mundial por su alto rendimiento. El volumen del concreto de la presa equivale a la edificación de cien mil viviendas.

El embalse de Pirrís almacena hasta 30 millones de m3 de agua.

El túnel de conducción es otra gran obra de ingeniería en manos del ICE. Se hizo con concreto y material blindado y alcanza los 1 200 metros de profundidad y 10 000 metros de largo. Su diseño es exclusivo, debido a las particularidades del terreno, tiene una inclinación especial para mejor caída y velocidad. El túnel finaliza “aguas abajo” en la Casa de máquinas, en El Carmen de Bijagual de Aserrí.

La Casa de máquinas está cimentada en un pozo de 27 metros de diámetro y 23 metros de profundidad, en una edificación de 15 metros de altura para proteger las dos turbinas de 68 MW cada una que operan la Planta. Se enlaza con la Subestación de 230 kW que refuerzan la línea de transmisión Tarbaca-Pirrís-Parrita.

“Por sus características, la Planta Hidroeléctrica Pirrís responde a las metas propuestas por el ICE: fortalece la calidad del suministro de electricidad del país, refuerza la generación de energías renovables y disminuye el consumo de petróleo”, subrayó Teófilo de la Torre, presidente ejecutivo del ICE.

Emergente victorioso

Como un Ave Fénix, la Planta Hidroeléctrica Pirrís venció retos durante las fases de estudio y edificación que, entre otras dificultades, se vio gravemente afectada con la Tormenta Alma en el 2008 y, a finales del año pasado, con la Tormenta Thomas.

Así, Pirrís se levantó de los escombros. Sus trabajadores tomaron herramientas, coraje para hacerle frente a los daños causados por esos fenómenos naturales.

Pirrís ha escrito con su historia relatos de satisfacción en 24 comunidades, siete cantones y dos provincias que se beneficiaron con mayor desarrollo local.

Once millones de dólares fueron aportados por el ICE en 136 proyectos sociales y ambientales. Entre ellos 15 km nuevos en caminos, señalización vial, 34 km en aceras, barandas, aulas, plazas deportivas y reforzamiento a centros de salud. La educación ambiental y planes de manejo de la cuenca propiciaron la calidad de vida y el crecimiento integral de los pobladores.

Álvaro Castillo, director del proyecto, considera que la puesta en marcha de Pirrís es una garantía al desarrollo sostenible. “El ICE pone a la orden del país una planta de la más alta calidad, de energía limpia y renovable, diseñada y construida por costarricenses, que suma al camino de progreso y de calidad de vida de nuestro país”.